¿Cabe una motivación genérica en la ponencia de valores o ésta debe realizarse en el acto de asignación individual de valor catastral del IBI?
La cuestión aquí controvertida se refiere al alcance que deba tener la motivación en las ponencias de valores. Entiende la Sala de instancia que la atribución de un determinado valor de calle, que implica un valor de repercusión superior al que correspondería por el polígono asignado, debe motivarse de forma circunstanciada y no con una mera cita (genérica) y reproducción del art. 8.2 del RD 1020/1993 (Normas Técnicas de Valoración); precepto que establece las circunstancias que deben considerarse para establecer el valor en calle, tramo de calle, zona o paraje. En sus alegaciones el Abogado del Estado reproduce jurisprudencia de esta Sala Tercera (anterior al nuevo recurso de casación) en la que se parte de la premisa de la diferenciación entre ponencia de valores y actos de asignación individualizada del valor catastral, aunque se trate de actos intrínsecamente relacionados. Diferenciación que tiene sus consecuencias tanto en el plano de la motivación, como en el plano de la recurribilidad. No puede exigirse a la ponencia de valores mayor concreción que la que permite el art. 25.1 TR Ley del Catastro Inmobiliario -esto es, formulaciones generales sobre criterios, elementos y módulos que han de tenerse en cuenta para determinar el valor catastral- y analizamos los defectos de motivación denunciados entonces desde una perspectiva genérica. El interrogante planteado respecto del alcance y la extensión de la motivación de las ponencias de valores (con incidencia directa en su recurribilidad y en los eventuales motivos que pueden ser aducidos) que presenta interés casacional objetivo para la formación de jurisprudencia consiste en confirmar, completar, precisar o, en su caso, corregir nuestra jurisprudencia en interpretación de los arts. 23 a 25 TR Ley del Catastro Inmobiliario a fin de aclarar el alcance y la extensión que deba tener la motivación de las ponencias de valores. En particular se trata de aclarar si en la ponencia de valores debe motivarse de forma circunstanciada expresando cuáles son las concretas circunstancias que han llevado a la atribución de un determinado valor catastral (es este caso, valor de calle) o si, por el contrario, esta motivación específica debe realizarse en el acto de asignación individual de valor catastral; con las consecuencias que de ello deriva por lo que concierne a la recurribilidad de la ponencia de valores en cuanto a los motivos de impugnación.
(Auto del Tribunal Supremo, de 9 de octubre de 2020, recurso .º 3025/20190)