Programando impuestos
Los conocimientos fiscales muchas veces no sirven para nada si no se posee un conocimiento informático de los sistemas de gestión que soportan las tareas fiscales en las organizaciones. Muchas veces se trata más de saber cómo usar el programa que de conocer las leyes fiscales, ya que aquél está programado para que no tengas que pensar, y ofrece soluciones más exactas que las que pudieras imaginar con los medios de cálculo y memoria humanos.
Hace unos días amanecía en la prensa un artículo en el que se afirmaba cómo los expertos contables y fiscales aconsejaban no utilizar los programas de software de la administración para cumplimentar sus obligaciones ya que éstos estaban diseñados a favor de la misma y obviaban deducciones y beneficios fiscales para el contribuyente.
Gran parte del conocimiento fiscal, como dice Ramón Chaler profesor de IRPF y de otras asignaturas en el Máster de asesoría fiscal/tributación de CEF, se ve reducido a apretar un botón en las casillas del programa informático de autoliquidación del impuesto. Y es que la informática irrumpe en todos los aspectos de la vida social y económica para quedarse, buena prueba de ello es el gran número de reformas legales que ha realizado la AEAT en los últimos años para digitalizar la gestión, muchas veces a riesgo de suponer una violación de los derechos de información y notificación del contribuyente/ciudadano.
En el campo de las sociedades mercantiles y su tributación ocurre lo mismo, con la ventaja de que en este caso, por razones probablemente de economía de escala o masa suficiente de clientes potenciales, la iniciativa privada ha desarrollado multitud de programas informáticos de todo tipo destinados a facilitar y automatizar en lo posible, la tareas de gestión fiscal con la máxima seguridad para los contribuyentes y sus asesores.
Este tipo de programas va desde la simple gestión contable, pasando por la gestión fiscal, hasta llegar al mayor nivel de integración con los modernos ERPs (Entreprise Resources Programs) que conectan interrelacionadamente todos los departamentos de la organización, de manera que lo que se hace en uno, se ve inmediata y automáticamente reflejado en el resto sin que el empleado tenga que hacer nada para este proceso, si acaso tan solo verificar que se ha realizado correctamente.
Por estas razones se han hecho un lugar imprescindible en las organizaciones, de manera que su conocimiento y experiencia práctica en el manejo han pasado de ser un plus en muchos de los puestos de trabajos ofertados en el sector contable y de gestión fiscal, para pasar a ser un “must” entre las llamadas habilidades transversales de los candidatos.
La oferta para este tipo de software es inmensa, pero hay una serie de firmas que tienen sus productos posicionados como líderes en el mercado, por franjas de volumen de negocio de la firma y consecuentemente por precio. Algunos de estos líderes son pej SAP, A3, Navision o Sage por nombrar solo algunos.
Es por ello que, a fin de satisfacer la creciente demanda de formación de calidad en esta materia, desde hace ya tiempo el CEF viene ofertando una serie de cursos de capacitación en el manejo de estas herramientas, ejemplos de los que actualmente son el Curso Práctico de Gestión Contable-Fiscal con A3 Software; y el Curso de SAP para Procesos Empresariales en Gestión Financiera
Ricardo Seoane Royo
Abogado, asesor de compliance, estrategia e innovación